Ex alcalde y ex DC, Luis García Jofré, no respetó el compromiso contraído, con firma ante notario de por medio, luego de perder las primarias de la Concertación en El Tabo por más de un 5% de diferencia frente al actual alcalde PPD, Emilio Jorquera Romero.De esta forma, García, quien fue apoyado abiertamente por el consejero regional, Roy Crichton (DC) y por el actual vicepresidente de la Democracia Cristiana, Diputado, Víctor Torres, luego de perder las primarias en El Tabo, quebrantó la palabra empeñada ante toda la comunidad tabina y decidió postularse de igual forma a alcalde, ahora por el partido progresista (PRO) de Marco Enríquez Ominami, no sin antes sondear otras alternativa a través del Partido Regionalista de Independientes, PRI.
Luis García militó por largos años en la Democracia Cristiana, partido al que renunció el año 2008 cuando no logró ser designado como candidato de la concertación e hizo el mismo intento actual.
Sin embargo, en aquella ocasión, los tribunales electorales lo impugnaron debido a las múltiples causas que mantiene pendiente en los tribunales de justicia. (No pago del Fondo Común Municipal, denuncia de vecinos por apropiación indebida debido a cobros por alcantarillados que jamás se construyeron-, No pago de convenio Movesa – Tradesan, etc, etc).
Frente a esta realidad cabe preguntarse, después de militar por tantos años en la DC, ¿Es posible que Luis García haya dejado de creer en los principios falangistas para, en forma espontánea y de un día para otro, abrazar los principios progresistas?.
Hagamos el sencillo ejercicio de revisar algunos de los principios del PRO y contrastémoslos con su nuevo acompañante.
En las declaraciones de principios programáticos del PRO, en parte del punto 2 se señala lo siguiente:
Nuestra tarea principal es pasar de una sociedad de privilegios a una sociedad de derechos, de oportunidades para todas y todos. Nos molesta profundamente la desigualdad, las injusticias, la prepotencia y el afán de ganancia y lucro a costa de la calidad de vida, los derechos laborales de los trabajadores, y el respeto del medio ambiente y el manejo cuidadoso de sus recursos. Tales cosas minimizan la cohesión social reproduciendo la segmentación y los clasismos odiosos, expandiendo los desconocimientos mutuos, los miedos, y la división interna e improductiva entre los chilenos y chilenas.
En parte del punto 4 de estos principios, se dice que “lucharemos porque nuestros adultos mayores reciban el trato digno que les corresponde, a la altura de los aportes que le han dado a nuestra sociedad”.
¿Podríamos pensar que el PRO cuenta con un nuevo militante o seguidor que cumple a cabalidad con estos principios?.
Luego de despedir a más de 40 funcionarios municipales, en un ataque de ira, al día siguiente de perder las elecciones municipales del año 2004. ¿Algún funcionario municipal de El Tabo se atrevería a asegurar que el candidato García respeta los derechos laborales de los trabajadores, tal como aparece en la declaración de principios del partido progresista?
Otro ejemplo:
En un programa de TVN, “Medianoche”, dirigido por el periodista Iván Núñez, se denunció a Luis García, hacen unos pocos años atrás, por engañar a un grupo de jubilados del sector Chépica, en El Tabo alto.
Les ofreció un proyecto para construcción de alcantarillados, exigiéndoles un monto de 25 UF por familia, pagadero en cuotas debido a los bajos ingresos de estos adultos mayores.
Lo que los vecinos ignoraban es que la Ley General de Urbanismo señala que los municipios no pueden solicitar dineros a los vecinos por estos trabajos. Estos alcantarillados jamás se construyeron.
Narda Torres, una vecina afectada y también de avanzada edad, encaró al ex edil a la salida de los tribunales de San Antonio. Este no se hizo cargo de estas acusaciones e insultó groseramente a la anciana, ante las cámaras de TVN.
El reportaje remató esta nota explicando que, el ex alcalde García no ha podido justificar ni respaldar cerca de trescientos millones de pesos por lo que mantiene un juicio con el municipio de El Tabo, lo que lo dejó fuera de estas elecciones (municipales de 2008).
Frente a estos ejemplos:
¿Se podría decir que al candidato García – le molesta profundamente la desigualdad, las injusticias, la prepotencia y el afán de ganancia y lucro a costa de la calidad de vida y de los derechos laborales de los trabajadores – o que, ante la denuncia de TVN, comparte esta otra frase – lucharemos porque nuestros adultos mayores reciban el trato digno que les corresponde, a la altura de los aportes que le han dado a nuestra sociedad-. tal como se declara en los principios del partido Progresista?.
El PRO y Marco Enríquez Ominami, a grandes rasgos, se han presentado frente a la ciudadanía como una nueva alternativa ante el duopolio Alianza – Concertación. Una nueva forma de hacer política con ideas progresistas y nuevos rostros.
Sin embargo, en El Tabo vemos a un candidato que no es rostro nuevo, que proviene de la DC y que, al perder las primarias locales, no cumplió con su compromiso y buscó un partido instrumental recurriendo al PRO. LNT
