Las nuevas tecnologías ya están totalmente implementadas en el área laboral: el computador, correos electrónicos y mensajes en línea son parte de cada día.
Un empleado 3.0 no solo maneja a la perfección estas herramientas, sino que además le saca partido al máximo a todas las facilidades que se pueden encontrar en Internet. Por ello, no necesita estar físicamente en la oficina, es ordenado y responsable con los objetivos propuestos, tiene una orientación al trabajo colaborativo y, en consecuencia, suele ser un excelente elemento para cualquier empresa. “El empleado 3.0 es aquel que se encarga de sacar partido de las nuevas tecnologías y que, por lo tanto, no se siente atado a horarios de trabajo, ya que es un profesional que gestiona su propio tiempo y por ello no considera imprescindible su presencia física en la organización. Es aquél que se encarga de producir y consumir la información para la multiplicidad de medios web y canales, ya que es su modo de trabajo, es decir, siempre se encuentra disponible, tanto vía correo electrónico como a través del blog, Twitter y demás redes sociales”, indica René Rivera, coordinador académico de Ingeniería Comercial de la Universidad del Pacífico.
El nuevo perfil de profesional que buscan las empresas es una persona que habita en el entorno digital y que es totalmente autónomo, por lo que el horario de oficina y la obediencia ciega a la jerarquía desaparecen. “Este empleado trabaja desde cualquier sitio y en cualquier momento, lo que se rige mediante la autonomía del propio profesional. Con esto, la gestión cambia, desde un control externo de un superior con horarios fijos a tener un empleado que tiene su propio control mediante objetivos específicos. Así, el empleado 3.0 tiene una mirada más horizontal de las jerarquías empresariales. Cambia el cómo, el cuándo y el cuánto, además del porqué y el para qué se trabaja”, describe el experto.
Características principales.
Contratar a un joven con todas las características de un empleado 3.0 puede ser muy beneficioso para la empresa, ya que aunque no estará físicamente en la oficina, siempre estará disponible vía online, además de estar fuertemente orientado a los objetivos planteados, ya que ambiciona crecer profesionalmente. “Es un trabajador con desarrolladas competencias de adaptabilidad al cambio, para lo cual necesita comunicación más directa, con menor burocracia en la toma de decisiones. Se pregunta siempre el por qué y el para qué, es competente, eficiente y tiene alta motivación al logro. Está dispuesto al aprendizaje continuo, sea vía capacitación o logros académicos, y demuestra ambición laboral al querer escalar en jerarquías en la organización”, señala el docente de Ingeniería Comercial de la Universidad del Pacífico, René Rivera.
Es el sueño de todo empleador: hace su trabajo sin presiones, es eficiente y es comprometido con la empresa. “El empleado 3.0 demuestra una alta flexibilidad horaria y laboral, tiene claro los conceptos de Responsabilidad Social Empresarial y Responsabilidad Social Corporativa, y además tiene una participación creativa e innovadora en los procesos organizacionales. Es un trabajador que actúa con objetivos claros, lo que le exige y permite un autocontrol de sus tiempos. Así como puede ejecutar su labor en ejercicio de la flexibilidad horaria, siempre estará disponible en la red”, describe Rivera.
Según el experto en recursos humanos de la U. del Pacífico, hay cinco principales ventajas de contratar un empleado 3.0:
1. Es un empleado autosuficiente y auto eficaz: No dependerá de horarios ni de jerarquías que le impongan en su trabajo.
2. Es versátil y se adapta a los cambios: Se puede sustituir a personas que cumplen funciones muy delimitadas por empleados 3.0, ya que éstos últimos se caracterizan por tener gran versatilidad y adaptabilidad a los cambios.
3. Es un ahorro para la empresa: Al tener empleados trabajando desde su hogar, la empresa ahorrará electricidad e, incluso, quizás en el arriendo de espacios físicos.
4. Más y mejores talentos: La distancia entre los empleados no es un problema, por lo que al derribar barreras geográficas se pueden atraer más y mejores talentos.
5. Es un empleado flexible: Un empleado con flexibilidad es un empleado más productivo y también más feliz.