El proyecto se realiza gracias a la adjudicación de un Fondo Regional de Iniciativa Local (FRIL) por parte del municipio que asciende a $36.597.441 millones de pesos.
A la suma obtenida a través del concurso se agregan 7 millones de pesos más aportados por la municipalidad, los que se verán materializados en la instalación de luminarias ornamentales las que consisten en 22 faroles tipo pagoda, permitiendo una gran claridad durante las noches para las caminatas nocturnas y sobretodo para la seguridad de los visitantes en su llegada al terminal de buses que se encuentra en el sector.
“Ya tenemos instalada la etapa subterránea de la luminaria, pero las pagodas se ubicarán al terminar la etapa para evitar que sean destruidas”, indicó el alcalde de El Tabo Emilio Jorquera.
Dentro de las obras que se desarrollan en la tradicional plaza tabina se encuentra la instalación de escaños y solerillas y el diseño del nuevo trazo interno de circulación con la colocación de pastelones para el movimiento peatonal.
También se encontrarán terminadas en la primera etapa las áreas verdes con la instalación de pasto y arbusto, manteniendo el sentido del lugar, como punto verde de la comuna.
Luego del término de las obras que hoy se realizan se proyectan varias etapas más, las que contemplan juegos infantiles, máquinas de ejercicios, pérgolas y la remodelación del terminal de buses.
Tala de antiguos árboles.
Reacciones de tristeza provocó en parte de la comunidad tabina la tala de dos antiguos cipreses que se encontraban desde hace más de 50 años en la plaza 12 de Febrero, sin embargo entendidos en la materia explicaron la necesidad de sacarlos del lugar por el grave peligro que revestía el nivel de inclinación y el crecimiento de los ganchos de los ejemplares.
“Aunque a los vecinos les provoca cierta nostalgia fue necesaria la corta de estos pinos ya que ‘ponían en riesgo a los transeúntes, se trataba de árboles que superaban por mucho la altura permitida y se encontraban con una inclinación de más del 30 por ciento, luego al cortarlos nos dimos cuenta además de que en el centro de sus troncos, se encontraban completamente podridos”, aseguró el edil.
Según un estudio realizado por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), ambos especímenes se encontraban con daño mecánico ocasionado por el viento, con inclinación de las copa y levantamiento de la calzada revistiendo serio peligro para los transeúntes y vehículos, sobretodo en los juegos infantiles que se encontraban en el radio de caída de los ganchos de uno de los árboles.